No son los logros, son las personas que los hacen posibles.

No es saber andar, es la persona que tuvo paciencia y me dio la mano, una y otra y otra vez.
No es reír, es la persona que hace que mis carcajadas suenen por las calles de cualquier ciudad.
No es mi sonrisa, son las personas que se camuflan tras ella.
No es saber leer griego y escribir francés, son las personas que me lo enseñaron. Y que fueron pacientes conmigo.
No es saber títulos de libros, son personas que los escribieron.
No es saber analizar poemas, son las personas que me sonrieron cuando yo encontré la solución.
Tampoco es saber donde poner tildes y funciones verbales, son personas que me lo enseñaron.
No es tener ganas de andar, son las personas con las que compartiré el viaje.


No son los logros, son las personas que los hacen posibles.


Sin los demás seres humanos que nos regalan esos regalos invisibles que muy pocos ven, no podríamos seguir nosotros solos, en un mundo desierto de emoción.


"Hola Mundo,
Te voy a regalar besos, abrazos, te quieros y muchos días de color. Para que lleguen a tus manso todas estas cosas, las repartiré entre todas aquellas personas que quiero, esas que llenan mis días de cariño y que siempre siempre me sacan una sonrisa.


Ellos son la fuerza de mis pasos, y la ventana que da al mar de mis ojos.


Espero que te gusten mis regalos. Me alegro de formar parte de tí, que lo sepas.
Es lo mejor que pudo pasar, y si pasó e spor algo.


Te quiere mucho,


Adriana"