que amores imposibles siempre habrán,
puertas y ventanas que nos los mostrarán.
Tierras y confines inexplorados,
que siempre perdurarán.
Las fuentes de la vida
nos abastecerán.
Colores y ritmos
que por todas partes sonarán.
Cantos y bailes
que siempre alegraran.
Que a pesar de las tristezas,
nuevas alegrías aparecerán.
Que amores perfectos nunca habrán,
pero si vendrán de aquellos
que se complementarán.
Perseguiremos el nuevo futuro,
que cada día cambia de rumbo.
Y perseguiremos retos,
y horizontes,
eso no lo dudo.
Oh, Bécquer,
tu eres el sol de las mañanas
la brisa de las tardes,
la luna de las noches.
Paginas sin sentido y vacías
que tu llenas de armonía
y palabras bonitas.
Versos llenos de amor y calidez,
de tristeza y honradez.
Tu plasmas tu realidad,
la mía y la de todos.
Plasmas los amores,
las dichas, las catástrofes.
Tu eres capaz de explicar,
la perdición del hombre,
la madurez de la mujer,
tu eres capaz de definir
los más puros sentimientos,
los de más adentro,
y con ellos nos enseñas
que eres un maestro..
Ángel de la verdadera poesía,
te llaman aquí,
pues será por tu armonía
y tu claridad,
por tu amor inconfundible
y tu sinceridad.
Te podría llenar versos,
de lo grande que eres,
pero solo te digo,
que no tuviste,
lo que en realidad mereces...

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